El presente trabajo propone reflexionar de modo crítico sobre las prácticas corporales contemporáneas en el espacio público. A partir del siguiente análisis se busca problematizar las concepciones tradicionales del cuerpo que prevalecen en el espacio público y cómo pueden ser interpeladas desde manifestaciones corporales emergentes.
Este escrito recupera experiencias situadas en contextos urbanos donde el skate se configura como una herramienta de encuentro, inclusión y re significación del espacio compartido. Desde diversas pesquisas se reconoce en esta práctica otras formas de estar y relacionarse con el entorno (Ambrust y Ascaño Lauro, 2010, Honorato 2013. Savadin y Ambroggio. 2017, Corwin et al. 2019, Saravi 2019). A través de una mirada que integra la perspectiva de derechos, accesibilidad y diversidad corporal, se considera al skateboarding (Donati, 2021, 2023) como una práctica pedagógica potente que promueve autonomía, creatividad y apropiación activa del espacio urbano. A sabiendas de los desafíos que enfrentan estas prácticas en relación con las políticas públicas, el diseño urbano y la utilización del espacio público. La propuesta se inscribe en una línea de trabajo que entiende la educación física como un campo ampliado, capaz de dialogar con experiencias corporales emergentes y su potencial valor pedagógico.